Con el paso de los siglos los gatos negros han sido demonizados debido a las historias de brujas y brujería. Dependiendo de la época y el lugar donde se originó la superstición, los gatos negros eran emisarios de la buena suerte, mala suerte o representaban la reencarnación animal de las brujas. Los gatos negros fueron perseguidos durante varios siglos en toda Europa a causa de estas supersticiones.
Los gatos negros y la brujería
En la caza de brujas del siglo 15 que se llevó a cabo en toda Europa en un esfuerzo por acabar con las religiones paganas, muchas personas tenían la creencia de que todas las brujas tenían criaturas pequeñas como ranas, pájaros, serpientes y en ocasiones gatos negros. El folklore sostuvo que las brujas utilizaban el poder de estas criaturas para lanzar hechizos malignos. En esa época muchas personas ancianas que tenían una vida solitaria y aislada con sólo la compañía de un gato negro se les asociaba con la magia y la brujería, siendo una prueba desafortunada de que la persona era una bruja o brujo. Si algún desastre azotaba una aldea y una mujer anciana que vivía cerca con su viejo gato negro era denunciada como una bruja, se le culpaba del desastre. Se llevaron a cabo crueles ejecuciones como la quema en la hoguera tanto de las brujas como de sus compañeros felinos.
Algunas historias:
Existe una historia en Escocia que habla de un poderoso terrateniente que le desparecieron misteriosamente sus suministros de vino. Decidido a atrapar al ladrón se escondió en su bodega. Al rato se vio rodeado por unos misterios gatos negros. El terrateniente atacó con su espada y los gatos se desvanecieron rápidamente. Pero cuando levantó el candelabro se encontró con una pierna de uno de los felinos cortada. A la mañana siguiente, una mujer anciana conocida por haber mantenido a un gato negro, fue descubierta desangrándose con una de sus piernas cortadas.
Se creía que las brujas realizaban sus aquelarres en un castillo en ruinas a la luz de la luna transformándose en grandes gatos negros. Algunos aldeanos se ofrecieron para ir al castillo y capturar a los brujas. Al entrar en el castillo, fueron atacados por decenas de enormes gatos negros feroces. Uno de los hombres murió a manos de uno de los gatos, el resto después de vencer a los felinos con garrotes corrieron con heridas sangrantes de nuevo a la aldea. Por la mañana, varias mujeres solteras de la aldea se encontraban cubiertas de hematomas, como si se les hubiera golpeado con garrotes.
Los gatos negros y la brujería
Otra historia habla de un campesino que a medianoche, le cortó la oreja a un gato negro que quería comerse sus gallinas. Al amanecer volvió al campo y no se encontró con el oído de un gato, pero sí que vio el oído de una mujer con un pendiente.
Existe el mito de que un muchacho que se encontró con tres brujas que se estaban transformándose en gatos negros. Las brujas le hicieron jurar al niño que guardara el secreto, permitiéndole que se fuera. A su regreso a casa, el niño le explicó a la madre lo que había presenciado. Días después, el niño fue encontrado muerto con el cuerpo cubierto con cientos de marcas de garras.
El rey Carlos I de Inglaterra tenía un gato negro. Él creía que este gato le daba suerte y tenía tanto miedo de perderlo que lo tenía vigilado día y noche. Coincidentemente el gato murió el mismo día antes de que las tropas parlamentarias de Oliver Cromwell llegaran y arrestaran al rey. Poco tiempo después, el rey Carlos I fue decapitado.
La superstición de los gatos negros por el mundo
La superstición de los gatos negros por el mundo
En Italia, muchas personas tienen la superstición de que si un felino manchado de tinta se acuesta en la cama de una persona enferma, la muerte estará cerca.
¿Quién no ha pensado alguna vez después de ver un gato negro conllevaría un presagio de mal augurio? Pero esto depende de que parte del mundo te encuentres, e incluso dentro de los diferentes países existen creencias y supersticiones relativas a los felinos negros.
Si una persona vive en los Estados Unidos o Europa entonces los gatos negros que puedan pasar frente a ti significa presagio de la mala suerte.
Sin embargo, si una persona vive en el Reino Unido o en Japón, los gatos negros son presagios de la buena fortuna.
En Alemania los gatos negros que se cruzan en el camino de una persona de derecha a izquierda, representa un mal presagio. Sin embargo, de izquierda a derecha el gato está otorgando tiempos favorables para la persona.
En China hay los que creen que los gatos negros son presagios de la hambruna y la pobreza.
Agricultores letones, que encuentran gatitos negros en el silo significa que habrá buenas cosechas. Ellos creen que estos felinos son el espíritu de Rungis, el dios de las cosechas.
En Escocia, la gente cree que si un gato negro se sienta en el porche de su casa es un signo de riqueza y felicidad.
En la mayoría de las partes del mundo se cree que un gato negro que se dirige hacia la persona es una certeza de que la buena suerte viene a su vida. Si el gato se detiene y se da la vuelta antes de que se acerque entonces no corre ningún riesgo para hacer apuestas. Acariciar la piel de los felinos negros trae salud y riqueza. En algunas comunidades pesqueras, las esposas de los pescadores tienen sus gatos dentro de casa, creyendo que esto mantendrá a sus maridos a salvo de cualquier peligro mientras que están en el mar. Muchas personas alrededor del mundo creen que existe un solo pelo blanco en los gatos negros. Tirar de ese pelo sin hacer ningún daño al animal se dice que la persona tendrá un matrimonio largo, feliz y próspero. Cualesquiera que sean las supersticiones locales sobre los gatos negros, la mayoría de los dueños de gatos se consideran afortunados y bendecidos. Y en verdad es una bendición poseer un gato, negro o no.
Fuente:http://www.mundoesotericoparanormal.com/
Comentarios Facebook
0 comentarios:
Publicar un comentario