
Para muchas personas, la Biblia menciona la existencia de gigantes en varios lugares en el mundo, conocidos como los Nefilim. A principios de 2012, el investigador y explorador Michael Tellinger mostró al público lo que parecía ser la “huella de un verdadero gigante”, de 1,2 m de largo en una roca de granito cerca de Mpuluzi, en la frontera con Suazilandia al noreste de Sudáfrica. Tellinger fue capaz de dar una explicación más detallada sobre la misteriosa huella, conocida como la “Huella de Dios”.