Ha sido bautizada EGS8p7 y hace unos 13.200 millones de años emitió los haces de luz que ahora llegan a los telescopios terrestres. Como el Universo tiene unos 13.800 millones de años, la galaxia descubierta forma parte del llamado universo joven, cuando habían pasado solo 600 millones de años desde el Big Bang.
Los astrónomos están más asombrados de los misterios que el descubrimiento entraña que de la aparición en sí de la galaxia, que supera el récord de la EGS-zs8-1, presentada en mayo pasado al mundo astronómico y que se encuentra a 13.000 millones de años luz de distancia.
La nueva galaxia aporta nueva información sobre las formas de determinar distancias y sobre la evolución del Universo cuando era muy joven, pero mucha de esa data es aún incomprensible para la ciencia, reconocen los astrónomos.
Las grandes diferencias del Universo remoto y el actual
Entre las respuestas que busca ahora la ciencia el misterio de la luz que ha llegado no es el menos importante. Durante muchos millones de años el cosmos estaba demasiado caliente para que se formasen átomos neutros y “todo era una sopa de electrones y protones por la que los fotones, las partículas de luz, no podían circular libremente, así que era opaco”, explican los astrónomos participantes del descubrimiento en el diario El País de Madrid.
Recién al ocurrir la reionización del hidrógeno, la emisión se volvería transparente. Sin embargo, haber encontrado una galaxia que emitió su radiación cuando el Universo, ante de a reionización estaba aún “opaco” es todo un desafío a ser explicado.
Entre las explicaciones posibles está la existencia de “propiedades especiales”, un término que solamente revela lo que falta por saber aún, sobre el tema en cuestión
“La galaxia que hemos observado, EGS8p7, que es inusualmente luminosa, pudo estar alimentada por una población de estrellas especialmente calientes y pudo tener propiedades especiales que permitieron la formación de una gran burbuja de hidrógeno ionizado mucho antes de lo normal para las galaxias típicas de aquella época”, explica el astrónomo Sirio Belli, coautor del artículo que publica Astrophysical Journal Letter y cuyas declaraciones recoge El País de Madrid.
Fuente: www.lr21.com
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